Altamente eficaz, su fórmula, rica en Bisabolol de origen vegetal, alivia la sensación de sobrecalentamiento.
Las microalgas verdes regeneradoras previenen el envejecimiento de la piel y el ácido hialurónico vegetal puro hidrata profundamente la piel.
Enriquecido con manteca de karité orgánica, el gel cremoso para después del sol regenera, realza y prolonga el bronceado.
Su fragancia 100% natural, con divinas notas de Aloe Vera y Jazmín Blanco, deja un velo olfativo aterciopelado, fresco y lechoso sobre la piel.
Apto para todo tipo de pieles, incluidas pieles sensibles, embarazadas y niños a partir de los 3 años.
Principales ingredientes activos
Ácido hialurónico puro y natural: obtenido por biofermentación de una bacteria láctica y un germen de trigo, forma una película no oclusiva en la superficie de la piel para mantenerla hidratada y protegida.
Aloe Vera: Rica en agua y minerales, hidrata y calma intensamente la piel.
Bisabolol Vegetal: Calma, calma y protege la piel deshidratada o dañada reduciendo la tirantez y devolviendo la flexibilidad de la piel.
Manteca de Karité: Agente hidratante excepcional, combate eficazmente la sequedad de la piel y tiene importantes propiedades antienvejecimiento, tonificantes y suavizantes.
Microalgas verdes: Rica en astaxantina, una molécula 40 veces más antioxidante que el betacaroteno, esta alga protege las células de los radicales libres y previene el envejecimiento prematuro.
Después de un baño o ducha, aplico el Gel Cremoso After Sun generosamente sobre mi rostro y cuerpo, masajeando suavemente.
Además, antes de cada exposición al sol, aplico generosamente el protector solar facial SPF30 o SPF50 + en todo el rostro. Vuelvo a aplicar cada 2 horas (cada hora para los niños) y después de cada baño.
Para una protección completa, aplico el protector solar corporal SPF30 o SPF50 + en todo el cuerpo y lo vuelvo a aplicar con la mayor frecuencia posible.