Limpieza profunda. Ofrece una rica y cremosa espuma para realizar la limpieza de manera suave, respetuosa y efectiva. Tras su uso la piel permanece sedosa y delicadamente perfumada.
Realizado por saponificación en frío. Al contrario que en el proceso de saponificación industrial que calienta los aceites por encima de los 200 grados, el método artesanal es más laborioso y costoso pero los aceites vegetales no son sometidos a altas temperaturas en ningún momento, respetando al máximo sus beneficios, por lo que mantienen sus propiedades intactas.
Zero waste. Al ser en formato sólido se reduce drásticamente la necesidad de envase, siendo una opción más sostenible que responde al imperativo de reducir nuestro impacto medioambiental.
Packaging reciclado y sostenible. La primera envoltura en contacto con el jabón está realizada con PLA, un polímero biodegradable que se origina a partir de recursos renovables al 100% como son maíz, remolacha, trigo y otros productos ricos en almidón. El papel exterior, en el cual está plasmado las preciosas ilustraciones, es 100% reciclado.
Fabricación artesanal. Realizada con el mayor mimo y de manera artesanal, es por ello que cada pastilla es única y puede haber pequeñas variaciones de tonalidades por los ingredientes utilizados.
Práctico. Puedes llevarlo de viaje sin restricción en los aviones. Al ser una pastilla de jabón sólida, además de durar más ocupa menos volumen, por lo que es perfecta para viajar con ella.