¿Por qué hacer una sinergia?
En primer lugar, ¿qué es una sinergia? Una sinergia consiste en asociar diferentes aceites esenciales y/o vegetales para reforzar la acción que se busca. Estos aceites pueden tener distintas propiedades, lo que permite obtener una mezcla que actúa a distintos niveles. Sin embargo, si tienen las mismas propiedades, pueden reforzarse mutuamente para obtener el efecto deseado, ya que tienen modos de acción distintos.
Estas sinergias se pueden utilizar de varias maneras (vías de administración):
Por vía cutánea, la vía de preferencia, es decir, masajeando sobre la piel diluidas en un aceite vegetal. De ahí la necesidad de conocer la dosificación de aceites esenciales y de aceites vegetales.
Por vía olfativa, gracias a un Aromastick inhalador, un difusor, o sencillamente respirando del frasco.
Por vía oral/sublingual respetando bien las proporciones y diluyéndolas en un soporte neutro como un comprimido neutro, azúcar, una cucharada de aceite vegetal, etc.
¿Cómo determinar la dosis?
Las dosis de aceites vegetales dependen del uso que se quiere hacer. En efecto, en función de la utilidad, el porcentaje de dilución de un aceite esencial en un aceite vegetal no será el mismo. Esto quiere decir que el porcentaje de dilución no será el mismo si quieres tratar un catarro o curar una fractura.
En Pranarôm, se considera que 1 ml corresponde a 30 gotas
Si quieres, por ejemplo, realizar un tratamiento casero de tipo sérum facial para hidratar, nutrir la piel (una piel sin problemas particulares), en tal caso se aconseja diluir el aceite esencial al 1 % en el tratamiento. Por tanto, en este ejemplo, diluiremos un 1 % de aceite esencial de lavanda verdadera en 50 ml de aceite vegetal de jojoba.
Está formulado sin tensioactivos agresivos y sin perfume. Produce una espuma fina y suave que respeta la piel de toda la familia. Está adaptado a la higiene de los bebés (desde el nacimiento) y de las pieles sensibles y reactivas.
pH fisiológicamente adaptado a un uso diario en cara, cuerpo, cabello y/o manos.
No pica los ojos. Sin alérgenos, sin perfume, sin colorantes y sin sulfatos. Respeta la piel y el planeta.
Para un uso cutáneo, la dilución variará según el uso y el órgano para el que se destina. Tradicionalmente está admitido utilizar las diluciones siguientes:
1 %: acción dermocosmética
3 %: acción reparadora tegumentaria: solución nasal, auricular, vaginal
5 %: acción sobre el sistema nervioso
7 %: acción circulatoria, sanguínea y linfática
10 %: acción muscular, tendinosa, articular
- acción sistémica para pieles hipersensibles
- solución para los aceites esenciales irritantes (canelas)
15 %: acción deportiva y competición
20 %: acción sistémica para pieles sensibles (bebés) solución para los aceites esenciales dermocáusticas (fenoles)
30 %: acción local muy potente
¿Cómo crear mi sinergia?
En un stick inhalador:
Saca el algodón del stick inhalador
Coloca con precaución las gotas de aceite esencial a lo largo del algodón.
Vuelve a colocar el algodón en el stick y cierra con la base.
¿Tu stick ya no huele? Retira delicadamente la base y añade de nuevo el número de gotas necesario en el algodón.
¿Cómo conservar la sinergia?
Los aceites esenciales, muy sensibles a los rayos ultravioletas que modifican su estructura bioquímica, se conservan en frascos de vidrio (marrón, verde, azul). Son muy volátiles y pierden progresivamente su acción si no están sellados en frascos estancos. No olvides cerrar el frasco después de usarlo para preservar su riqueza en moléculas y, por tanto, su eficacia.Siguiendo estas reglas de base, puedes conservar una sinergia de aceites esenciales durante 1 año.
En cambio, en el caso de una sinergia a base de aceites esenciales y de aceites vegetales, te aconsejamos usarla en 6 meses.
En efecto, los aceites vegetales son más sensibles a la oxidación, es decir, que hay que protegerlos del aire, la luz y el calor.
¿Y en modo reciclaje?
¿Quieres limpiar tus frascos? Lo confesamos: limpiar los frascos de aceites esenciales y vegetales no es fácil, todo lo contrario. Los aceites esenciales son difíciles de limpiar por varias razones: olores fuertes, aspecto "graso", a veces, incluso, coloraciones.
Estos son algunos consejos:
Llena un barreño de agua muy caliente (superior a 70ºC).
Añade líquido lavavajillas en el agua.
Introduce los frascos durante 2 horas o más.
Aclara cada frasco con agua clara.
A menudo, esta fase sigue sin ser suficiente. Solo hemos hecho una "limpieza general".
Utiliza un cepillo para botellas (muy fino) y frota. Añade unas gotas de lavavajillas.
No te saltes este paso, es crucial.
Aclara de nuevo con agua.
Deja secar al aire libre al revés.
Precauciones clásicas de los aceites esenciales.
Los aceites esenciales se componen de moléculas aromáticas muy potentes, por lo que es importante respetar los modos de uso, las dosificaciones y las precauciones de uso para evitar cualquier riesgo. Estas son las precauciones clásicas que puedes seguir:
Se desaconseja el uso de aceites esenciales puros si no estás acostumbrado. Opta siempre por la dilución en un soporte:
- Aceite vegetal, manteca de Karité, crema cosmética, especialidad farmacéutica, gel de ducha, champú y otro soporte.
Miel, azúcares, siropes, yogures, miga de pan, comprimido neutro sin lactosa u otro soporte.
No apliques ni ingieras aceites esenciales o esencias que contengan cumarinas (=> cítricos) antes de la exposición solar (fotosensibilizante).
En caso de alergia, realiza previamente un test cutáneo en el pliegue del codo. Espera 10-15 minutos para ver si reacciones mal o no.
Para el uso de aceites esenciales en bebés, niños, mujeres embarazadas o lactantes, es esencial consultar previamente a un farmacéutico o a un médico para actuar con total seguridad.